¿Cuál es el la mejor época para reformar mi casa?
Cuando nos planteamos el realizar una reforma en nuestro hogar hay que planificar todo al detalle, ya que no es lo mismo hacer una pequeña modificación en el interior que una obra de gran envergadura. Como siempre comentamos, lo primero es contar con un equipo de profesionales debidamente acreditados que puedan aconsejarnos sobre cómo y cuándo es mejor lanzarnos a la aventura de la reforma. Pero siempre hay unos puntos clave que debemos tener en cuenta.
Si lo que deseamos es hacer una modificación en pintura general, modificación de tabiques de separación o en pavimentos o alicatados de la cocina o los baños, debemos cerciorarnos de que las tuberías de agua, conducciones de gas o calefacción, e instalaciones eléctricas estén en perfectas condiciones, y de no ser así aprovechar y ponerlas en orden, de cara a evitar que una vez terminada la reforma tengamos humedades o fallos en la distribución de los suministros básicos.
Sin duda alguna, y dependiendo donde se ubique la vivienda, la mejor época es la que traiga menos lluvias, ya que de esta manera todo secará con mayor rapidez y evitaremos el tener que paralizar la obra cada dos por tres. No deben hacerse en los meses más calurosos ya que hay materiales que pueden ver alteradas sus propiedades por un excesivo calor ambiental, fechas idóneas podrían ser las que van de mayo a junio.
La época del verano es la ideal para obras de gran envergadura que no permitan que continuemos alojados en nuestra casa, ya que podemos tomarnos vacaciones teniendo en cuenta que los pequeños de la casa no tienen colegio, y dejar campo abierto a los operarios para que la terminen sin interrupciones, y posiblemente al haber menos vecinos en el edificio ocasionaremos menos molestias, susceptibles de denuncias y paralizaciones, debido a que este tipo de reformas implican mayores ruidos, escombros, polvo, colocación de andamios y trabajadores usando montacargas o ascensores de continuo.
Además al contar con más tiempo libre podremos estar al tanto de los avances, ver que el grueso de la obra se ejecuta en tiempo y forma e ir tratando con el contratista los detalles que no podrá realizarse por el clima y que deberemos dejar bien apalabrados para otras épocas.
En ambos casos es imprescindible contar con las licencias o permisos pertinentes, y solicitarlos con la anticipación necesaria para que podamos comenzar a reformar nuestro hogar en la época y con la duración prevista.
Imágenes: | Pinterest: Diego Viana Gomes | Telva.com